TRES RAZONES POR LAS QUE DEBERÍAS ADAPTAR TU PODCAST A UN AUDIOLIBRO

22 de febrero de 2024

Despacho desde la oficina de Ochenta en París

En una industria que está en constante transformación, los creadores de podcast tienen que afinar el oído ante las nuevas tendencias. Atrás quedaron los tiempos en que sólo se dependía de los ingresos publicitarios o de proyectos por encargo. En un panorama en el que los modelos de negocio deben evolucionar constantemente, llegan los audiolibros: un faro de monetización directa para los creadores de podcast.

Según la Federación Europea de Editores, los audiolibros están en alza: hubo un incremento de la oferta en un 112% en Dinamarca, un 177% en Italia e incluso un 68% en el Reino Unido en 2022 frente a 2021. En 2024, los audiolibros seguirán representando una parte creciente de una industria mundial multimillonaria.

Pero, ¿cómo entran los podcast en esta discusión? ¿No son una categoría totalmente diferente? No te preocupes, en las siguientes tres razones por las cuales deberías adaptar tu podcast a un audiolibro vamos a hablar de ello.

1. Los podcasts tienen todos los elementos necesarios para hacer un audiolibro

Imagínate esto: a tu alrededor, las plataformas de streaming, la nueva norma para la televisión y el cine, intentan captar tu atención constantemente. Cada vez hay más pagos mensuales, más oferta. Y, aunque existe ese universo que cada vez se expande más y que cada vez genera más ruido, en algún lugar de tu biblioteca, un libro espera pacientemente a que regreses por él. Espera a que revivas la primera experiencia que te dio al leerlo. Sin importar lo viejos o lo nuevos que sean, el encanto de los libros sigue siendo inquebrantable. Puede que Blockbuster haya caído en el olvido, pero ¿las librerías? Son un testimonio de la magia perdurable de la literatura en todas sus formas, ya sea un clásico de bolsillo, una maravilla electrónica o el cautivador encanto de un audiolibro.

Y, si lo piensas bien, ¿de qué está hecho un audiolibro? Empresas como Pushkin Industries llevan adaptando libros a audiolibros desde 2019 y su primer audiolibro, Talking To Strangers, incluye entrevistas, audio de archivo e incluso recreaciones de transcripciones judiciales. Suena muy parecido a un podcast, ¿verdad? Si quitamos las capas, descubriremos que comparten el mismo ADN. Incluso el diseño de sonido y las canciones de los podcast pueden formar parte de un audiolibro si es necesario. Los podcasts y los audiolibros tienen una relación simbiótica que es un universo en sí mismo por explorar.

2. Los audiolibros se pueden monetizar directamente

Elaborar un audiolibro a partir de un podcast es un arte en sí mismo. Requiere delicadeza, creatividad y un profundo conocimiento de lo que la audiencia está buscando. Convertir un podcast en audiolibro puede darle a tu público la oportunidad de pagar directamente por tu contenido, sin las limitaciones de un intermediario publicitario. Pero recuerda siempre esto: estás produciendo un nuevo producto para su compra, así que asegúrate de crear contenidos adicionales por los que merezca la pena pagar.

Para nuestro Mija Podcast: El audiolibro, establecimos un mapa de los audiolibros que nuestra audiencia ama. Descubrimos que a los fans de libros como Not Your Perfect Mexican Daughter, Americanah, The Good Immigrant, The House on Mango Street también les gustaría nuestra propuesta.

Así que, investiga: ¿qué escucha el público de tus podcasts? ¿Existen audiolibros similares sobre esos temas que interesan a su audiencia? Si es así, ¿qué puedes aportar de nuevo que otros no hayan planteado todavía? Y, aún más importante, ¿cómo aporta su nuevo audiolibro contenido nuevo y exclusivo relacionado con la marca de tu podcast?

3. Es un primer paso para adaptar tu propia propiedad intelectual a un nuevo formato

En Ochenta, no nos limitamos a hacer un hechizo y esperar que pase lo mejor. Nos arremangamos y nos sumergimos en un meticuloso proceso de transformación para que nuestros podcast sean el mejor audiolibro posible. Desde el reformateo hasta la redacción de nuevos contenidos, cada aspecto se cuida meticulosamente para mejorar la experiencia del usuario. ¿El resultado? Tu podcast favorito, elevado a nuevas esferas y con elementos de lujo: piensa en efectos de sonido, interludios musicales y nuevos capítulos exclusivos.

Y sabemos de primera mano que conservar el control creativo sobre tu propiedad intelectual (PI) es primordial para iterar su contenido en diferentes formatos y ampliar el valor de esa propiedad.

Piensa, por ejemplo, en Stay Sexy & Don't Get Murdered, el audiolibro derivado del podcast My Favorite Murder. Este último es un programa de humor sobre crímenes reales presentado por Karen Kilgariff y Georgia Hardstark, en el que se cuentan sus crímenes reales favoritos y comparten historias de crímenes locales de amigos y oyentes. El audiolibro, aunque incluye historias del mismo género, habla del valor de la autodefensa y la seguridad personal, así como de cuestiones culturales y sociales significativas que subyacen a sus historias de delitos reales. Las presentadoras convirtieron la propiedad intelectual de un programa de humor (su podcast) en un contenido de alto debate social (su audiolibro).

Además, en un sector en el que las adaptaciones atraen a más público y más inversión, ampliar los límites de los contenidos ya existentes a nuevos escenarios puede ser el primer paso de muchos para pensar en adaptaciones diferentes, a otros formatos. Cuanto más se pueda expandir el universo de tu podcast a otros formatos, más posibilidades tendrás de monetizarlo.

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